Santa Fe llegó a Barquisimeto sin nada que esconder, luego de un viaje corto desde Valencia arribaron al hotel de concentración, bajaron del autobús elegantemente trajeados de gris con camisa blanca y corbata roja, sin embargo uno de ellos se despojó del saco como llegando a su casa, ese era Luis Manuel Seijas.
Todos saludaron y hablaron el tiempo requerido, hoy le darán acceso a los medios al entrenamiento porque según el técnico del equipo “cardenal” Néstor Otero “aquí ya no hay secretos, ellos nos conocen a nosotros y nosotros a ellos”.
Mientras Santa Fe optó por ser abiertos CD Lara se decantó por el hermetismo, se concentraron en Cubiro de donde bajarán mañana a reconocer la cancha. Cuestión de estilos.
La vuelta de Seijas a Barquisimeto tiene un sentido bastante emotivo, “es la primera vez que vengo a Venezuela a jugar con mi equipo, lo lamento mucho, pero ojalá que la suerte está del lado nuestro”, comentó el valenciano con un mezclado acento colombo-venezolano.
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